Cada 17 de Junio se celebra el Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía. Este año está dedicado a la relación existente entre la degradación de la tierra y las migraciones. Es lógico pensar que en estas tierras desiertas en las que no nace vegetación es imposible que sobrevivan animales y humanos, forzando la migración de los mismos. Esto trae otro problema asociado y es la sobrepoblación de algunas zonas, lo cual causa un perjuicio en la naturaleza de las mismas.
Cinco causas de la desertificación acelerada por el hombre
Entendemos por desertificación la transformación de tierras fértiles en tierras desérticas o semidesérticas por actividades humanas. La única diferencia del término desertificación con el de desertización es que en este último las tierras pasan a convertirse en desierto por causas naturales, no por acciones humanas.
Entonces, ¿cuáles son las actividades humanas que aceleran la desertificación?
- Sobrepastoreo. El pastoreo intensivo de larga duración no permite que las plantas del territorio en el que se lleva a cabo la actividad se recuperen. Esto provoca que estas áreas se vean sometidas a un mayor efecto de erosión, tanto por agua como por viento, convirtiéndolas en desierto. Puede ser que el ganado pertenezca a explotaciones agrícolas mal gestionadas, pero es posible que existan sobrepoblaciones de animales salvajes, tanto nativos del territorio como foráneos.
- Empleo inadecuado del suelo y del agua. Cuando se riegan lugares secos y cálidos con aguas que contienen sales se acaba salinizando el suelo, lo que impide el crecimiento de la vegetación. Asimismo, algunas malas prácticas agrícolas pueden despojar al suelo de sus nutrientes, acelerando la desertificación.
- Tala de árboles y minería a cielo abierto. Tanto la deforestación como la minería a cielo abierto hacen que se deteriore la cubierta vegetal que protege el medio natural. La pérdida del suelo se incrementa ya que la desmesurada tala de árboles favorece que sea arrastrado por lluvias y vientos, haciendo muy difícil su reparación.
- Compactación de los tipos de suelo. La acción del agua en los suelos sin vegetación y el uso de maquinaria pesada en los mismos provoca que el estos se endurezcan, se compacten, impidiendo el crecimiento de raíces, la filtración del agua y la absorción de nutrientes, convirtiendo esas tierras en desierto.
- Incendios forestales. Este tipo de incendios provocan la pérdida de la cubierta forestal. En muchos casos se originan de forma accidental, por ejemplo, por la falta de precaución con la basura que se deja en entornos naturales, por el abandono de campos, quema de rastrojos…
Estas son solo algunas de las causas de la desertificación que tienen consecuencias catastróficas, tanto para el planeta que habitamos como para nosotros mismos. Desde EMBERIZA como consultoría ambiental, creemos que es muy importante que se celebre este día mundial, así como de todos los demás días propuestos por la ONU: Día Mundial del Agua (22 de Marzo), Día Mundial del Medio Ambiente (5 de junio).... El objetivo no es otro que concienciar a cada una de las personas que habitamos el planeta Tierra de la obligación que tenemos con el medio ambiente. Desde el agricultor hasta la familia que va a pasar un día al campo debe ser consciente de los impactos que pueden causar sus actividades y de que, muchos de ellas, son irreparables. Planeta solo hay uno, cuidémoslo entre todos.
Este artículo ha sido redactado por Sara González Rodríguez, colaboradora de Emberiza en materia de Marketing Digital